miércoles, 7 de enero de 2009

silencio es la respuesta


el frío se mete entre las uñas,
las sábanas dejan el rastro de la huida,
silencio es la respuesta.
los restos de algún que otro pecado
se resisten a abandonarme
y en las mañanas sufro su presencia.
la magia benefactora del chocolate

no acaba de funcionar.

parece que hoy tampoco va a cambiar nada
salvo que sea verdad
eso de que los miércoles no existen.
en ese caso, todo estaría como tiene que estar,
como en un desierto al llegar la noche,
como al final de la sesión en un cine de verano,
como en el último sorbo de una botella de oporto,
como en el bosque silencioso que es esta habitación.


3 comentarios:

bloweme dijo...

la magia benefactora del chocolate igual no acaba de funcionar, pero la magia benefactora de un buen relato acaba de provocar un aplauso¡clap¡clap¡no hay frío peor que el que se mete entre las uñas...
un saludo

Anónimo dijo...

El silencio no tiene por qué ser necesariamente negativo. La cosa es que siempre va cargadito de significado. Hay silencios magníficos.

Anónimo dijo...

Á, aquí el frío se te mete por todas partes y lo mejor para no sentirlo es el silencio.

Budapest es chachi.
Ven.


L.